Introducción
Desde el año 2016 hasta la actualidad, se han tomado un total de 1.339 muestras para evaluar la calidad del agua consumida por las familias de nuestro país. De ese total, 584 muestras fueron recolectadas por la Fundación Aguas, y analizadas en laboratorios certificados, donde se evaluaron características Bacteriológicas y Parámetros Fisicoquímicos, incluyendo la presencia de arsénico y plaguicidas.
Por su parte, el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) aportó 755 resultados específicos sobre la detección de arsénico, contribuyendo de manera significativa al monitoreo de este contaminante en el agua de consumo.
Todos estos datos están disponibles en el Mapa del Agua, una herramienta interactiva que permite visualizar los resultados según el tipo de fuente en la que se recolectó cada muestra. Este mapa busca promover la transparencia, el acceso a la información y la conciencia sobre la calidad del agua que consumimos. ¡Ayúdanos a cambiar esta realidad!
Referencias
Una fuente de agua es cualquier lugar natural o artificial de donde se origina o se extrae agua. Puede tener distintos usos como beber, cocinar, asearse, preparar alimentos y/o limpieza.
Se refiere a la presencia de microorganismos patógenos, principalmente bacterias que pueden representar un riesgo para la salud humana.
Este elemento químico, puede filtrarse naturalmente desde las formaciones geológicas al agua subterránea. La exposición prolongada puede causar cáncer de piel, pulmón, vejiga y riñón. Es incoloro, insípido e inodoro, lo que lo hace difícil de detectar sin análisis de laboratorio. Cumple: <0.01 mg/l ; Al límite: > 0.01 hasta 0.05 mg/l; No cumple: > 0.05 mg/l
Se refiere a la presencia de sustancias químicas o alteraciones físicas que afectan la calidad y la seguridad del agua para el consumo humano.
Estos compuestos químicos, utilizados para controlar plagas en cultivos, pueden infiltrarse en fuentes de agua a través de escorrentía, filtración o mal manejo, convirtiéndose en un riesgo para la salud.